La recién develada Casa Sierra Fría de Pérez Palacios Arquitectos Asociados (PPAA) es una reivindicación de la visión creativa de esta firma mexicana: “nos conduce una arquitectura de ideas, no de formas”, se lee en su manifiesto. Y justo así es como se han expresado al concebir el diseño de esta casa situada en Lomas de Chapultepec, Ciudad de México. De apariencia contundente y geometría precisa, es una fortaleza de conceptos y detalles que se revela hacia su interior.

Erguida sobre 350 m2, la propiedad se eleva en el centro de su superficie y da lugar a tres volúmenes apilados, que disminuyen gradualmente de tamaño. A su alrededor, en la planta baja, jardines verticales cubren la superficie de un muro negro que rodea Casa Sierra Fría, para darle a sus habitantes una mayor sensación de privacidad.

“La mayoría de los lotes en la zona residencial tenían construcciones regulares en tres de sus cuatro lados; para el concepto arquitectónico del proyecto, entonces, decidimos explorar la idea de un lote como vacío contenido con una cuadrícula estructural abierta encima de él, donde cada cuadrante tiene un programa distinto y establece una relación propia con el patio que le rodea”, han dicho los arquitectos.

La justa variedad de materiales descubre su estilo apenas se está en la puerta de la calle: paisaje seco con grava, una gran roca frente a la propiedad, con un camino que conduce a la entrada principal. PPAA Arquitectos se decantó por una construcción simple adosada por concreto marcado con tablas y grandes extensiones de cristal, que cubren hasta parte de la bóveda para dar paso a una mayor iluminación natural.

En el interior, los arquitectos eligieron una paleta simple para complementar la estética del exterior; cálidos tonos beige en muros complementan los pisos de madera que se encuentran en toda la casa. En planta baja, grandes puertas corredizas de cristal permiten el acceso al patio a un corredor, un salón y un comedor.

Una escalera de madera, con una delgada barandilla de metal, conduce al piso de arriba. El dormitorio principal y el estudio privado están hacia el frente de la casa, mientras que los dos dormitorios de los niños están en la parte trasera, con vista al patio.

“La cuadrícula estructural de Casa Sierra Fría está intersectada en el centro por una escalera y los centros de servicio, lo cual crea una apertura hacia el exterior. Encima de esta estructura se encuentra un bloque sólido, que contiene las áreas privadas de la casa, pero que aún permite la entrada de la luz con sus aperturas de vista restringida”, precisan los arquitectos sobre esta obra.

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